Para continuar con la
relación de soldados que nacieron en La Laguna o que sirvieron en La Laguna
durante la era virreinal, particularmente en la Segunda Compañía Volante de San
Carlos de Parras, mencionaremos la constancia de filiación certificada por
Antonio García de Tejeda el 6 de marzo de 1800, (Simancas, copia en la Ibero-Torreón)
relativa a “Hilario Morales”, quien declara ser hijo de “Antonio Morales” y de
“Felisiana Albarado”, y ser natural del pueblo de Parras, de oficio “campista”.
De acuerdo a los registros
genealógicos de los Santos de los Últimos Días, su hermana, María Rosa del
Carmel Morales Alvarado, fue bautizada en Parras el 22 de septiembre de 1769, y
se consignan los nombres completos de sus padres, “Joseph Antonio Morales” y
“Alexandra Feliciana de Alvarado”.
Hilario tenía una estatura
de 5 pies y 3 pulgadas, esto es, 1 metro y 60 centímetros. Su religión era la
católica apostólica romana, tenía pelo negro, su rostro era de color “trigueño”
con hoyos de viruela, tenía la nariz “larga” y era lampiño de barba. El 1 de
febrero de 1784 sentó plaza en la Compañía de Caballería de San Carlos de
Parras. Como no sabía firmar, aceptó las ordenanzas haciendo la señal de la
cruz, atestiguando el sargento Bernardo Castro y el cabo Antonio Orozco, de la
misma Compañía.
El 2 de junio de 1795,
Hilario se reenganchó en el mismo cuerpo militar, y fue promovido a cabo el 28
de diciembre de 1796. En el primer tomo del libro de matrimonios de San José y
Santiago del Álamo (Viesca, Coah.) con fecha del 14 de enero de 1789, consta
que Hilario Morales apadrinó una boda. El apunte dice:
“… Yo Dn. Manuel Sáenz de
Juangorena, Capellán de la Segunda Compañía Volante de San Carlos de Parras y
actual Teniente de cura deste Pueblo de tres años a esta parte, desposé
solemnemente… a José Antonio Flores, originario del Pueblo de San Juan del
Mezquital…y ha María Josefa Fernándes, originaria del Real de Niebes… fue
padrino Ylario Morales originario de esta jurisdicción, soldado razo de la
segunda compañía Volante de San Carlos de Parras que está a cargo del Capitán
dn. Juan Francisco Carmona, casado con María Eufracia García…”
Otro soldado que sirvió en
la Comarca Lagunera fue José Tiburcio Rocha González. Era hijo de José de Rocha
y de María Teodora Gonzalez. Tiburcio era oiginario de la hacienda de Palmitos,
jurisdicción de San Juan del Río, obispado de Durango. Su hermana Valentina
Faustina, fue bautizada en el templo de San Francisco, en San Juan del Río, el
25 de febrero de 1748.
José Tiburcio era
“labrador” antes de entrar a la milicia. Tenía 23 años en 1781 (nació hacia
1758) y medía “cinco pies y una pulgada” de estatura, es decir, un metro y
cincuenta y cuatro centímetros, aproximadamente. Como todos los novohispanos de
la época, se declaraba “católico apostólico romano”. Tenía el pelo negro, ojos
pardos, color trigueño, nariz chata y se le consideraba “barbilampiño”.
Fue elegido miliciano el 24
de abril de 1781 en el Escuadrón de Guardias Presidiales de San Juan del Río.
Como la mayoría de los agricultores de su época, no sabía leer ni escribir.
Fueron testigos suyos para ese primer periodo de servicio el sargento Bernardo
Castro y el soldado Gregorio Quiñones.
El 1 de enero de 1784, José
Tiburcio pasó al Destacamento del Pasaje. El 1 de febrero de ese año fue
transferido a la nueva Compañía Volante de San Carlos de Parras. El 1 de
diciembre de 1795 ascendió a cabo.
Su hoja de servicios está
fechada en Álamo (Viesca, Coahuila) el 16 de octubre de 1797. Fue premiado con
la pensión de “tres tiempos” otorgada en San Ildefonso el 10 de agosto de 1798.