Imagen del Jordan Times
Los recientes ataques de Israel contra los palestinos de la Franja de Gaza, han sido repudiados de manera unánime en el mundo entero. Ayer, fuerzas israelíes bombardearon con obuses la locación de Jabaliya, victimando a decenas de civiles. Muchos de éstos eran niños que se encontraban refugiados en una escuela de la Organización de las Naciones Unidas, a pesar de tener bien desplegados los emblemas que la identificaban como tal. Ya antes de este bombardeo, se decía que del 20% al 30% de las víctimas palestinas, eran niños.
Estas luchas desiguales entre un estado poderoso y bien armado, y una población que resiste como puede, recuerda el cerco y la destrucción del Ghetto de Varsovia, en Polonia, durante la Segunda Guerra Mundial. La actual invasión a Gaza aparentemente se origina en la reciente adquisición palestina de cohetes a través de su frontera. Se ha dicho que estos misiles tienen poco alcance (unos 40 kilómetros). Con esto, la capacidad de respuesta de los palestinos de Gaza se ha incrementado, y esta nueva situación no será tolerada por Israel. En ambos bandos, está en juego una lucha por la seguridad nacional.
El Estado de Israel indica que su lucha no es contra el pueblo palestino, sino contra una organización, Hamas. Pero el hecho es que la población civil palestina ha sido duramente afectada, a pesar de tales declaraciones. Los responsables de esta desproporcionada política de defensa-agresión son los sectores duros del Estado de Israel. Y por esos sectores, muchos judíos de todo el mundo son indebidamente culpados. Existe una gran cantidad de judíos que profesan la paz, y que están en absoluto desacuerdo con las políticas agresivas del Estado de Israel. Muchos de ellos viven en Israel, pero la gran mayoría, vive fuera.
En la Comarca Lagunera existe un amplio sector de la población que posee raíces palestinas. Es lógico y explicable que se exprese indignación ante los recientes hechos del Medio Oriente. Desde el punto de vista histórico, el primer responsable de la lucha entre israelitas y palestinos, es Inglaterra. Durante la Segunda Guerra Mundial, cuando Churchill se comprometió a desmantelar el Imperio Británico a cambio de la ayuda militar de los Estados Unidos, los ingleses les ofrecieron un estado propio a palestinos y judíos por igual, a cambio del apoyo que los anglosajones requerían. Cuando llegó el momento de cumplir, los ingleses salieron de Palestina y se lavaron las manos, dejando en Medio Oriente una bomba de tiempo.
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