Escudo de Torreón

Escudo de Torreón

domingo, junio 28, 2009

Charla sobre vinos en el Arocena



A las 19 horas del próximo jueves 16 de julio, el Dr. Pablo Lacoste Gargantini, de la Universidad de Santiago (Chile) ofrecerá una plática en el auditorio del Museo Arocena, cuyo título será "Cultura del vino en Argentina y Chile: una perspectiva comparada".

Esta charla, que estará abierta a todo público que desee asistir, se llevará a cabo en el marco de la celebración del “XII Seminario Iberoamericano de Viticultura y Ciencias Sociales” en Torreón. Al terminar la charla, se ofrecerá a la concurrencia una degustación de vino.

El Dr. Pablo Lacoste Gargantini, argentino de nacimiento, radica en Chile desde 2003. Es presidente de la “Asociación Iberoamericana de Viticultura y Ciencias Sociales”, sociedad académica con presencia en América y Europa. El Dr. Lacoste es Licenciado en Historia por la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional de Cuyo (Mendoza, Argentina); ha fungido como Profesor de Historia en la Facultad de Filosofía y Letras de dicha institución educativa, así como Profesor titular del Instituto de Estudios Avanzados de la Universidad de Santiago de Chile. Es Investigador principal de un proyecto FONDECYT; Profesor del Doctorado en Estudios Americanos, del Magister en Política Exterior y del Magíster en Estudios Internacionales (Universidad de Santiago, Chile).

Pablo Lacoste es Doctor en Estudios Americanos, con mención por la Universidad de Santiago de Chile, con la tesis doctoral: Frontera e imagen del vecino: Argentina y Chile (1534-2000), la cual fue publicada en: México / Buenos Aires: Fondo de Cultura Económica, 2003. Es Doctor en Historia por la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires.

El Dr. Lacoste Gargantini ha publicado una cantidad impresionante de textos de historia, cuyo listado rebasa por mucho el espacio de esta crónica.

viernes, junio 26, 2009

Cólera en La Laguna, 1849


Imagen, fuente.

“El Monitor Republicano”, en su edición del 31 de julio de 1849, página 4, menciona la presencia del temible cólera en La Laguna de Durango. Dice literalmente el texto de su nota:

“El cólera. El 16 del actual comenzó a desarrollarse esta epidemia en la capital de Durango, sin que se sepa hasta ahora el número de los enfermos.

En el mismo Estado, partido de Cuencamé, del 7 al 14 fueron atacadas 140 personas, de las que murieron 17. Del resto seguían unos bastante graves, y otros en convalecencia.

En La Loma han muerto 3, en Sombreretillo 38, en la Cabeza 28, y cerca de 60 en San Juan de Guadalupe. Se ignora el total de enfermos que había habido en estos cuatro últimos puntos”.

jueves, junio 25, 2009

Una batalla en Nazas, 1866.



Una vieja nota publicada en la página 2 del “The Mexican Times”, periódico imperialista de la era de Maximiliano, menciona una batalla librada cerca de Nazas, contra los “disidentes” laguneros enemigos del régimen monárquico del príncipe austríaco.

La nota trae fecha del 3 de febrero de 1866, y su texto, transcrito del inglés, dice así:

“Durango. Los disidentes de La Laguna han sido derrotados cerca de Nazas por el capitán D´Aigresaux y su compañía. Las bajas de los disidentes fueron 80, entre muertos y heridos.

Los habitantes de Cerro Gordo han solicitado al gobierno [imperial] armas y oficiales para organizar una fuerza militar para la protección del lugar, y también para destruir las guerrillas”.

viernes, junio 19, 2009

Fuerte chubasco



Una intensa precipitación pluvial se dejó sentir esta tarde en Torreón, a partir de las 4.15 p.m. La ciudad se obscureció casi por completo con los nubarrones, y en algunas partes dejaron de funcionar servicios como la electricidad y el agua potable.

Tal vez este intenso chubasco ponga cierto límite a la temperatura ambiente, ya que este ha sido un año récord para Torreón. Desde finales de abril ha habido por lo menos 19 fechas con temperaturas iguales o superiores a los 40 grados Celsius.

Todo parece indicar que este año puede ser lluvioso. Conagua ya había advertido de la posibilidad de soltar agua de las presas Francisco Zarco y Lázaro Cárdenas, dado que mantienen sus niveles de agua altos, y bastaría una temporada lluviosa para llenarlas al tope.

Don Ángel Urraza Saracho


Fotografía procedente del archivo familiar Urraza

Uno de los empresarios más notables que han iniciado sus capitales en la rica Comarca Lagunera, fue don Ángel Urraza y Saracho. De acuerdo a su ficha en el “Catálogo de Extranjeros” de Gutiérrez Galindo, p. 554, Ángel nació en Alonsotegui (anteiglesia de Alonsotegi, Vizcaya, España), el 1 de marzo de 1891.

Como buena parte de los jóvenes españoles de la época, salió de España en edad militar, ya que llegó a Veracruz el 23 de agosto de 1910, de 19 años.

Al decir de Fernando Mota Martínez, Ángel Urraza fue uno de los forjadores de México por haber sido un destacado empresario: agricultor, banquero, exportador, asegurador, afianzador, “amante de las artes”, y gran precursor de la industria hulera mexicana.

De España llegó a Veracruz, luego a Torreón, y finalmente, al Distrito Federal. En la Comarca Lagunera comenzó a crear un vasto capital, primero como empleado de la familia Arocena, posteriormente, como fundador de la Compañía Agrícola de Lequeitio.

En 1928, Ángel Urraza marchó hacia el Distrito Federal para emprender negocios relacionados con la manufactura de tenis, y otros productos de hule. Su “Compañía de Artefactos de Hule Euzkadi” fue el antecedente de la “Compañía Hulera Euzkadi” fundada en 1928.

Con el tiempo y con mucha visión, se asoció con la empresa fundada por Benjamín Franklin Goodrich, de Akron, Ohio, empresa que se convertiría en la mundialmente conocida Compañía Goodrich-Euzkadi.

jueves, junio 18, 2009

Congreso Nacional de Cronistas



La Asociación Nacional de Cronistas de Ciudades Mexicanas, A.C. celebrará su XXXII congreso nacional ordinario el mes próximo. El evento se efectuará del 15 al 18 de julio en Saltillo, teniendo como ciudad subsede a Parras.

El congreso será inaugurado por el profesor Humberto Moreira Valdés, Gobernador del Estado de Coahuila. En el marco de las actividades del primer día de labores, figura la toma de posesión del profesor Matías Rodríguez Chihuahua, Cronista de Matamoros y nuevo presidente de la Asociación Nacional de Cronistas.

Entre los trabajos de este XXXII congreso nacional, figuran las exposiciones sobre diversas temáticas, fenómenos y períodos históricos, como son La Independencia Nacional, La Reforma e Intervención Francesa, La Revolución Mexicana y Crónicas de mi Pueblo (cronistas infantiles).

jueves, junio 11, 2009

Pandemia por el virus A/H1N1



La Dra. Margaret Chan, Directora de la Organización Mundial de la Salud, declaró hoy en Ginebra que la influenza provocada por el virus A/H1N1 ha alcanzado el estatus de pandemia, de acuerdo al protocolo de dicha organización.

Según dijo la Dra. Chan, existen pruebas "indiscutibles" de contagio sostenido del virus fuera de la región donde se detectó por primera vez. “Los países en que la epidemia alcanzó un punto culminante tienen que prepararse para una segunda ola", advirtió. Por esta razón, la O.M.S. decretó el estatus de pandemia, es decir, ha reconocido oficialmente la propagación del virus a nivel global, y alerta al mundo.

La contabilidad muestra que de finales de marzo al día de hoy, ha habido 27 mil 737 enfermos en el mundo, con 141 muertes. 74 países han sido afectados por esta influenza. Del total de enfermos, 13 mil 217 serían de Estados Unidos, 5 mil 717 son de México, y 2 mil 446 de Canadá.

miércoles, junio 10, 2009

El XII Seminario, ya próximo







La Asociación Iberoamericana de Viticultura y Ciencias Sociales celebrará próximamente en Torreón su “XII Seminario Iberoamericano de Viticultura y Ciencias Sociales”. Este evento académico de carácter internacional, cuenta con los auspicios de la Universidad Iberoamericana Torreón (sede del evento), la Embajada de España en México, la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo, y la Casa Madero.

Las sesiones se efectuarán entre del 15 al 17 de julio próximo, y contará con las mesas “Antigüedad Clásica”, “Edad Media”, “Austrias y Borbones: España y América Colonial”, y “Época Contemporánea”.

Como parte del evento académico, y pensando en la comunidad lagunera, el Dr. Pablo Lacoste, investigador de la Universidad de Santiago de Chile, ofrecerá una charla que llevará por nombre “Cultura del vino en Argentina y Chile: una perspectiva compartida”. Esta charla se llevará acabo en el auditorio del Museo Arocena, el 16 de julio a las 19 horas. Al finalizar, se procederá al tradicional brindis y degustación de vinos.

Si desea visitar la Página Web del evento, pulse el siguiente enlace:

domingo, junio 07, 2009

Dictamen





Es verdaderamente lamentable que en el ámbito de la escritura de la Historia surjan conflictos de intereses entre nuevas y viejas publicaciones, entre funciones literarias (catálogo, narración) o en la manera de entender la propiedad intelectual de los acervos documentales y de las obras que de ellos se originan.

Mostraré las credenciales que me acreditan para hacer los comentarios pertinentes en este caso. Por el Manual de Funciones vigente, aprobado por el Ayuntamiento de Torreón desde 1992, al Cronista Oficial se le atribuyen como funciones el ser “Celoso guardián de la Ciudad, y de su patrimonio histórico-cultural”, “Investigador, recopilador y Notario Histórico”, “Intérprete y narrador, en crónicas, de los sucesos del presente” (como sucede en este caso), “Consultor de la autoridad en la evolución, al futuro, de los hechos que, según su leal saber y entender, serán favorables o negativos, promoviendo lo indispensable ante las autoridades y ciudadanía, a favor o en contra de esos actos o hechos” (como en el caso que nos ocupa), etc.

Una vez aclarada la pertinencia y sustento de mis juicios, y por solicitud de miembros del Cabildo Municipal para emitir un dictamen, mencionaré que hace unos días vio la luz un libro denominado “Asamblea de Culturas en La Laguna” del Lic. Jorge Rodríguez Pardo, actual director del Archivo Municipal. En honor a la verdad, diremos que este libro viene a suplir un hueco de información sobre las colonias extranjeras en Torreón, hueco que había sido llenado en 2002 por la Lic. Elisa Gutiérrez Galindo cuando publicó su “Catálogo de Extranjeros”. Ese vacío de información se formó de nuevo al agotarse, de manera casi inmediata, dicha edición. Así que “Asamblea de culturas” pone nuevamente en manos de los laguneros esos contenidos documentales.

Por otra parte, el Lic. Carlos Castañón Cuadros publicó el día de ayer en su columna semanal de un diario local, un texto denominado “Asamblea de Culturas, o de cómo plagiar un libro con dinero público”. La lectura desapasionada de dicho texto, muestra que se trata de la denuncia de un ciudadano contra lo que considera ser un plagio, con el agravante de haber sido publicado como libro, con dinero de los contribuyentes. No es la veracidad histórica del contenido del libro lo que cuestiona Castañón Cuadros, sino el uso de fondos públicos para imprimir una obra no original, como si realmente lo fuera.

Lo interesante del caso, es que Castañón Cuadros aporta lo que él considera evidencia de plagio. ¿Lo es? Lo que podemos deducir de los cuadros comparativos que aporta en su blog, es que la base de datos que dio origen a ambos libros, es la misma, y que por consiguiente, ésta existía desde el 2002. Esto es evidente e irrefutable. Además, está de por medio el testimonio personal de Castañón Cuadros, quien fue empleado del Archivo Municipal bajo la dirección del Lic. Elías Agüero, y tuvo acceso a dicha base de datos innumerables veces.

Queremos suponer que por su inexperiencia como historiador, el titular del Archivo Municipal omitió mencionar en su prólogo, que el libro “Asamblea de Culturas” consiste en realidad en una nueva edición corregida del “Catálogo de extranjeros” y de la base de datos de la Lic. Gutiérrez Galindo.

De aquí se desprende que en su prólogo, el Lic. Rodríguez Pardo debió haberle dado algún crédito al trabajo de su predecesora, máxime cuando se trata de dos directores de la misma institución, el Archivo Municipal, y a la vez, mostrar que su trabajo en “Asamblea de culturas” consistió en el reacomodo de la vieja información contenida en la base de datos de aquélla.

viernes, junio 05, 2009

La Academia Lagunera de la Historia



En meses pasados se fundó la Academia Lagunera de la Historia, la cual constituye una asociación civil (es decir, una asociación sin fines de lucro). En cierto sentido, se trata de una prolongación al presente de lo que fuera la Comisión de Historia para la celebración del centenario de Torreón como ciudad. 

La Academia Lagunera de la Historia es una asociación apolítica, y sus fines son eminentemente científicos y culturales. Su principal objetivo es el estudio riguroso de los fenómenos sociales de la Comarca Lagunera desde sus orígenes, con métodos científicos y académicos También se interesa en la difusión de los nuevos conocimientos obtenidos mediante los trabajos y proyectos que establezca o que le sean encomendados. La Academia Lagunera de la Historia busca fomentar el desarrollo de la ciencia del pasado en términos de calidad, así como el crecimiento cultural de la Comarca Lagunera, a través de la reseña, la crónica, el dictamen y la orientación sobre aquellas obras que entren en el ámbito de su objeto de estudio.

El testimonio del Comandante Bonavia y Zapata



Para abundar en la temática del artículo anterior, mencionaremos que existen diversos testimonios que dan cuenta de la relación causa-efecto que hubo entre los desórdenes de la temprana guerra de independencia y el significativo incremento del cultivo del algodón en la Comarca Lagunera. Uno de los más autorizados es el que nos dejó el Comandante de las Provincias Internas de Occidente, el mariscal de campo don Bernardo Bonavia y Zapata, en su comunicado del 22 de julio de 1813.

En su argumentación es enfático: el desorden que causó la guerra de independencia 1810-1813 en el comercio, alteró el abasto de materias primas y la distribución de los productos elaborados en la Nueva España, pero a la vez estimuló en las Provincias Internas, particularmente en La Laguna, la producción de las materias primas y de los artículos que escasearon. El algodón y sus manufacturas se contaban entre ellos. De esta manera, Bonavia y Zapata remonta el inicio de la significativa producción de algodón en la Comarca Lagunera al año de 1810.

Leamos de su puño y letra:

“La horrible y criminosa Ynsurrección de tierra afuera, que asoló las Provincias desgraciadas en q[u]e se propagó como un fuego deborador, disminuyendo su población, destruyendo la agricultura, las artes, el comercio y minería, dividiendo los ánimos quando gozabám[o]s de una constante y embidiable paz y unión […] aunq[u]e gracias a Dios, no ha influido en estas fidelísimas y exemplares provincias, en perjuicio de su unión, concordia e inalterable tranquilidad; pero obstruidas como han estado por largo tiempo las comunicaciones, ha sufrido y sufre, como era consiguiente, en todas sus ramos productivos por la falta de habilitación de unos, y de salida en otros. Este mal pasagero para nosotros, puede producirnos un bien permanente; la necesidad ha empezado a promover la industria en el hilado y tejidos comunes de algodón”.

La lectura de Bonavia y Zapata es bastante esclarecedora. En su opinión, la guerra de independencia en el período que él delimita entre 1810 y 1813, los disturbios armados que califica de “horribles” se dieron en la “Tierra Afuera”, es decir, en las provincias novohispanas al sur del Trópico de Cáncer. Consecuencia de esas luchas “horribles” fueron la disminución de la población así como la destrucción “de la agricultura, las artes, el comercio y la minería”.

Para Bonavia, la guerra civil era cosa de algunas provincias novohispanas, pero nada que hubiera afectado a las Provincias Internas, que permanecían “en unión, concordia e inalterable tranquilidad”. Sin embargo, las comunicaciones entre las provincias sureñas y las norteñas o Internas fueron obstruidas por mucho tiempo a causa del desorden.

Por esta razón, las Provincias Internas sufrían a causa del desabasto de algunas mercancías y por la dificultad de sacar algunas otras al mercado. En esa época, el Partido de Parras, era gran productor de vinos, aguardientes y ganado menor, mientras que la parte duranguense de la Comarca Lagunera producía minerales (Mapimí, Cuencamé) y ganado menor (hacienda del conde de San Pedro del Álamo). A pesar de lo anteriormente dicho, Bonavia reconoce que esa situación de desorden promovió en el País de La Laguna la industria de los hilados y tejidos de algodón.

Los lugares a los que fue enviado este documento de Bonavia fueron, en Durango: Cuencamé, Cinco Señores (Nazas), Mapimí, San Pedro del Gallo, San Juan de Casta (León Guzmán) y en Coahuila: Álamo de Parras (Viesca) y Parras. Es decir, la carta fue enviada a las viejas poblaciones que antiguamente formaban parte de la “Provincia o País de la Laguna” en las cuencas del Nazas y el Aguanaval, y que actualmente se ubican en los estados de Coahuila y Durango.

Fuente documental: “El Comandante de las Provincias Internas de Occidente, mariscal de campo don Bernardo Bonavia y Zapata, a los curas y habitantes de Cuencamé, Cinco Señores, Mapimí, Gallo, San Juan de Casta, Álamo de Parras y Parras” 22 de julio de 1813, AHCSILP en el Centro de Investigaciones Históricas de la UIA-Torreón, Edictos y proclamas 1813-1817, expediente 743, documento II.

jueves, junio 04, 2009

Algodón de Nazas, Dgo. en 1817



A raíz de los problemas de abastecimiento generados por la Guerra de Independencia, la población de Cinco Señores del Río Nazas (Nazas, Durango) inició su producción de algodón para el comercio interregional y para las manufacturas locales. Un interesante documento de pago de alcabalas de la localidad en 1817, nos da cuenta de la cantidad de fibra que se “exportó” ese año, del suelo fiscal de Cinco Señores. Es decir, se trata de la relación detallada del pago del impuesto al comercio del algodón “extraído” desde Cinco Señores hacia otros distritos fiscales de la Nueva España.

Dicho documento nos indica que, entre el 31 de septiembre de 1817 y el 31 de diciembre del mismo año, se realizaron 109 operaciones de dicho pago fiscal, que era de medio real por cada arroba de algodón. Las cifras consignadas nos indican que la cantidad de algodón que se comerció fue de 16 mil 501 arrobas. Se trataba pues de 189 mil 863 kilos y 140 gramos, o 189.86 toneladas.

Los comerciantes (probablemente algunos de ellos eran arrieros) que pagaban el impuesto para llevar el algodón de Cinco Señores a otros lugares, debían proporcionar a los alcabaleros sus nombres y lugares de residencia. De esta manera, sabemos por qué rutas transitaban y hasta dónde podía llegar dicho algodón. Los lugares de destino mencionados en esas 109 operaciones de pago fueron: Aguascalientes, Alaquines, La Aranda, Atotonilco, Avino, Ciénega Grande, Cocula, Cruces, Cuquío, Chalchihuites, Durango, Huajúcar, Jalostotitlán, Jalpa, el Jaral, Jerez, Juchipila, Lagos, León, Mezticacán, Mezquitán, Nieves, Nochistlán, Nombre de Dios, Río Grande, San Juan de los Lagos, Santiago, Sombrerete, Tabasco, Talpa, el Téul, Teocaltiche, Tlaltenango, Valparaíso, El Valle, Villa de La Encarnación, Villanueva y Zamora.

De estos lugares, los que aparecen con más frecuencia, en orden descendente, son: León, Nochistlán, Jalpa, villa de La Encarnación, Tlaltenango, Jalostotitlán, Lagos, Teocaltiche y Valparaíso. Estos 9 lugares de Zacatecas, del Bajío y del Occidente de México constituían el 54 % de los lugares mencionados en las 109 operaciones de pago de alcabala de 1817.

Nota: la versión completa de ese documento la transcribí y publiqué en un artículo de “Estudios Trasandinos”, Revista de la Asociación Chileno-Argentina de Estudios Históricos e Integración Cultural, coeditada por la Universidad Nacional de San Juan, la Universidad de la Serena y la Universidad Nacional de Salta. Número 13, 2006.

martes, junio 02, 2009

La historia "chafa"



De acuerdo a los criterios de la Real Academia Española de la Lengua, “chafa” es un adjetivo que se aplica coloquialmente en México a las cosas de mala calidad.

En este contexto, usamos primordialmente el término para calificar, no a las personas de los historiadores, sino a los relatos o los textos de historia, de mala calidad. Porque un colega que escribe, de buena fe, textos de historia, aunque éstos sean fallidos, merece respeto.

Sin embargo, existen también los “terroristas” de la historia, aquéllos que piensan que historiar consiste en establecer a sangre y fuego su muy particular, dogmática y hasta conveniente percepción de algunos hechos, para luego dedicarse a “hostigar” a todos aquellos que difieran de sus opiniones o intereses.

Estos “historiadores” suelen dedicarse a la “denuncia” de los “errores” de sus supuestos adversarios. Esta sí que resulta una visión “chafa”, además de paranoide, de lo que es el quehacer historiográfico. Este esquema de actividades y actitudes es muy común en poblaciones pequeñas, en las cuales existen personas que se erigen a sí mismos en “propietarios” de “la historia local” y que la “defienden” como cosa suya, con un encono digno de mejor causa.

Un historiador de verdad no se mide por la cantidad de exabruptos que lanza, sino por su obra académica. ¿Cuántos libros ha escrito? ¿Cuál ha sido la recepción de los foros académicos en que los ha presentado? ¿En qué congresos ha participado? ¿Cuál ha sido el dictamen de la comunidad científica en torno a sus propuestas?

Porque la historia académica no es una obra individual, sino un trabajo comunitario. Lo que una sola persona puede investigar o escribir, no tiene más valor que el de una propuesta. Es la comunidad científica la que determina el valor y sustento de la obra, aceptándola o rechazándola. Es la comunidad científica, nacional e internacional, la que cuenta con la erudición, la metodología y la capacidad crítica como para sancionar positiva o negativamente la obra del historiador individual. Se trata de un diálogo entre pares.

Por supuesto que existe la otra cara de la historia, no la científica, sino la que posee valor puramente literario. En esta se engloban los testimonios individuales y la historia de ficción. El testimonio personal tiene el valor de un testimonio, pero no de historia. No se puede elevar una experiencia personal al nivel de historia colectiva. El testimonio de los revolucionarios no coincide con el de los hacendados. ¿quién podría decir que un testimonio es verdadero y el otro falso?

Quizá el análisis de innumerables testimonios de todos los ámbitos y estratos sociales pudiera darnos una idea sobre la historia de la Revolución Mexicana.

La historia ficticia no tiene la pretensión de generar conocimientos nuevos, sino de entretener, de causar un impacto estético en el lector. Puede estar mezclada de elementos reales e imaginarios, pero nadie le asignaría valor científico.

Pero la historia verdaderamente “chafa”, es aquella que se quiere construir a base de plagios. A veces es tan fuerte el afán de figurar como historiador, que algunas personas acuden al método del robo. En su ingenuidad y mala fe, estas personas no se han dado cuenta de que, más que historia, hay historiadores. La historia no tiene existencia propia, no es una mariposa sin dueño que revolotea por los parques públicos y que cualquiera puede atrapar y reclamar como suya. Detrás de cada trabajo historiográfico serio hay un historiador serio que llevó muchas horas de investigación sistemática y de construcción de un discurso específico y muy reconocible.

Y aunque los amantes de lo ajeno crean que no se nota, la verdad es que no engañan a nadie. Los historiadores académicos saben bien quién ha escrito qué cosas. Bernal Díaz del Castillo, incorporado subrepticiamente en el texto de “Perico de los Palotes”, sigue siendo el inmortal Bernal Díaz. Y “Perico” no pasará de simple perico, mero repetidor.

lunes, junio 01, 2009

Concurso de Ensayo Histórico



En mi carácter de Cronista Oficial de Torreón y de miembro de la Comisión Estatal para ambas celebraciones, la Comisión Especial Encargada de los Festejos del Bicentenario de la Independencia y del Centenario de la Revolución Mexicana del Senado de la República ésta me hizo llegar para su divulgación, la convocatoria al concurso de ensayo histórico en las categorías de Independencia y Revolución Mexicana.

Ensayo Histórico en ambas categorías: Independencia y Revolución Mexicana.

Temática:

Independencia de México

Ensayo Histórico (La construcción de México)
Ensayo Histórico (Mujeres Insurgentes)
Ensayo Histórico-Jurídico (Autonomía, Independencia y Soberanía)

Revolución Mexicana

Ensayo Histórico (La identidad nacional)
Ensayo Histórico (Mujeres Revolucionarias)
Ensayo Histórico-Jurídico (Demandas y logros de la Revolución)

El premio único al mejor ensayo por cada tema en ambas categorías (Independencia y Revolución) es por la cantidad de $150 mil pesos M.N., además de recibir un diploma y una medalla conmemorativa que otorga el Senado de la República, bellamente acuñada en plata.
Se pueden consultar las bases de la convocatoria oficial en: